Enfoque. Carlos Díaz Figueroa. En una aspiración en razón legítima Manuel Añorve en espera de los tiempos.
“No hay que adelantar escenarios solo debemos respetar y esperar los tiempos estoy de tiempo completo en mi responsabilidad con la decisión de los guerrerenses en mi calidad de Senador de la República por el estado de Guerrero”
Fue la respuesta del senador priísta Manuel Añorve Baños después del destape en voz de la diputada Bety Vélez y el líder cetemista Rodolfo Escobar ambos dando certeza que es la carta para encabezar una alianza en común rumbo al 2027.
“Todavía no son los tiempos para adelantar escenarios aunque la aspiración es legítima como varios que también desean participar en la próxima sucesión gubernamental”, aseguró, al hacer un llamado a perseverar la cordura y unidad.
Lo anterior es un llamado con sentido de madurez política en aquellos que circunstancialmente decidieron separarse de las filas del PRI, por lo que, tal reflexión debe radicar en la conciencia para lograr una verdadera alianza de unidad.
A lo referente, el senador Añorve Baños fue muy respetuoso de las decisiones a veces extremas, no obstante que en forma y tiempo se debe poner en el centro del análisis un proyecto en común para lograr recuperar lo más viable para Guerrero.
En su estancia por Chilpacingo en una convivencia con los periodistas con motivó de la partida de Rosca de Reyes hablo de variados temas sobre el acontecer de las limitantes formas, en el caso del incremento a la gasolina entre otros obstáculos.
Con un rostro sereno como se distingue Manuel Añorve mostró una actitud de persistencia en una serie de reflexiones de cara a los desafíos, lejos del egoísmo político, sino, a un cambio del entorno por reconstruir un estado endeble y en deterioro.
Por ello, el interés con las formas y los tiempos para lograr una crucial alianza opositora que permita recuperar confianza en la ciudadanía en el momento de las decisiones por el cambio y respeto que merece el pueblo en general.
A todo ello, cabe reconocer que el Senador de la República es un político vigente que sabe hacer también buena política y que tiene el derecho de aspirar de manera legítima, sin que haya un obstáculo que impida y menos descartar su participación.
