También lo bueno cuenta. Las buenas acciones de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, el primer edil de Chilpancingo, Gustavo Alarcón, y las fuerzas federales y estatales restablecieron la paz social en la capital. Esto benefició a la gente que vivió más de tres días de momentos difíciles, donde el pueblo fue el que salió perdiendo por los daños colaterales: tres personas resultaron heridas con quemaduras por los incendios en las unidades del transporte.
Hoy se restablece el servicio del transporte público en Chilpancingo; las rutas comienzan a realizar sus recorridos con normalidad y los operativos por parte de los elementos de seguridad de los tres niveles de gobierno continúan.
Alumnas y alumnos entran puntuales a sus clases después de que la secretaria de educación en Guerrero anunció de manera puntual el regreso a clases en la zona centro. Este medio de comunicación, al realizar su recorrido en los diferentes planteles educativos y bases del transporte de ruta, pudo darse cuenta de que todo está a la normalidad.
Las rutas foráneas que llegan a la capital se restablecen, como también la confianza de la gente que llega a realizar algún trámite o cita médica. Hoy la capital regresa en un ambiente de confianza, sin la ayuda de los políticos representantes federales, ya sean diputados, senadores o personas que tienen un alto rango en el gobierno federal. Aquí el mérito y los buenos oficios son de la gobernadora y el interés del primer edil de la capital…
Lo bueno cuenta y hay que contarlo.
